Qué es y cómo funciona el GPS
Los móviles han metido en el bolsillo de cada ciudadano sistemas de posicionamiento global, desarrollado por la industria armamentística hace cincuenta años
Los teléfonos móviles inteligentes han
desplazado a los tradicionales navegadores GPS pensados para los
vehículos. Con su popularización, los «smartphones» han permitido que
cada persona disponga de una herramienta para guiarse fácil, intuitiva y, como gran baza, su actualización constante.
Pero, ¿cómo funcionan realmente?
Los sistemas de posicionamiento global -que así se llaman realmente-
permiten situar a una persona mediante un aparato la posición dentro del
mundo con una precisión de casi centímetros, en los productos más
punteros y avanzados.
Como otros productos tecnológicos que
han desembarco en la sociedad, sus inicios objetos para militares. El
Departamento de Defensa de EE.UU. comenzó a utilizarlos tras la II
Guerra Mundial. El GPS está organizado en función de 24 satélites en órbita
que se sirve de la trilateración -método matemático para determinar las
posiciones relativas de objetos usando la geometría de triángulos-.
El sistema se apoya en 4 satélites
como mínimo, que envían unas señales con el objetivo de identificar la
posición, así como la hora del reloj de cada uno de ellos. De esta
manera, y en función de estas señales, el sistea sincroniza el reloj
para calcular el tiempo que transcurre en regresar al equipo. Y todo
ello se realiza en cuestión de segundos. Una vez realizada esta operación, se devuelven las coordenadas que el sistema y ase encarga, mediante un software,
de señalizar en un mapa una vez encontrada la posición tridimensional
exacta. Uno de sus mejores aspectos es que funciona de forma continua y
en cualquier circunstancias atmosféricas.