Las seis estafas más comunes vinculadas a WhatsApp
Programas que permiten espiar conversaciones, opciones para
eliminar el doble tilde azul e invitaciones a la versión Premium son
solo algunos de los engaños vinculados a la popular aplicación de
mensajería
El éxito de cada plataforma trae aparejado un problema: los intentos de estafar a los usuarios, ya sea con malware o bien aprovechándose de su ingenuidad.
Lo
experimentan los usuarios de Windows y Android, los sistemas operativos
más empleados en computadoras y móviles, respectivamente, y también
sitios como Facebook, la red social más popular.
Es también el turno de WhatsApp,
que con su creciente cantidad de funciones atrajo a millones de
usuarios y por ende las miradas de estafadores y piratas cibernéticos.
¿Cuáles son las estafas más habituales en WhatsApp? La empresa de seguridad informática Panda elaboró una lista con las seis principales
1. Falsa invitación a las llamadas de voz de WhatsApp.
Aprovechando que millones de usuarios buscan acceder a esa nueva
herramienta, los ciberdelincuentes distribuyen malware a través de un
enlace que, en realidad, descarga de forma automática software
malicioso.
Protección: las llamadas de voz
están disponibles para todos en Android, pero igualmente muchos usuarios
aún no lo saben y de ahí que el peligro siga latente.
2. Fraudes vía navegador.
Después de que WhatsApp lanzara su versión web, surgieron sitios
fraudulentos con el fin de robar datos bancarios. Estas falsas páginas
web explotan distintos tipos de estafa: piden el número de teléfono de
los usuarios más incautos para suscribirlos a servicios premium de
descargas por los que cobran tarifas especiales. Además, pueden
descargar una aplicación en sus PC que, en realidad, es un troyano que
permitirá a los ciberdelincuentes obtener información tan confidencial
como los datos bancarios.
Protección: la única versión de WhatsApp para web es gratuita y no requiere descarga alguna para poder utilizarla.
3. Cómo desactivar el doble check azul antes de tiempo.
También los estafadores trataron de sacar partido del lanzamiento de la
famosa doble tilde azul. Antes de que el servicio de mensajería
instantánea permitiera desactivar esta función, en redes sociales se
anunciaban servicios fraudulentos para acabar con el color azul del
doble check. Conseguían así que algunos usuarios se suscribiesen, sin
saberlo, a un servicio de SMS Premium con una tarificación especial.
Protección: se puede desactivar el doble check desde la propia aplicación.
4. WhatsApp 'Oro'.
Autoridades españolas advirtieron hace unos meses de la existencia de
una estafa que puede salir muy cara. El fraude comienza con un mensaje a
través de redes sociales en el que se invita a los usuarios de WhatsApp
a hacer click en un enlace para actualizar su app a la inexistente
versión WhatsApp Oro, con supuestas nuevas y exclusivas características.
El enlace lleva a una web donde el usuario que aspira a disfrutar de
esas supuestas mejoras en su WhatsApp deberá dar su número de teléfono.
En realidad, todo aquel que dé su número se suscribirá a un servicio de
envío de mensajes de texto.
Protección: solo existe una versión de WhatsApp.
5. El falso contestador de WhatsApp.
Al contrario que las anteriores, esta estafa no aprovecha un servicio
recién lanzado por WhatsApp sino que, directamente, lo inventa. Un
correo electrónico notifica que se tiene un mensaje de voz en el
inexistente contestador de WhatsApp. Cuando se intenta reproducirlo no
se logra nada sino que se descarga un software malicioso con el que los
estafadores se colarán en el dispositivo. A partir de ahí, se deben
esperar mensajes de texto con tarifas especiales o el robo de
información confidencial.
Protección: no existe ningún contestador de WhatsApp.
6. El espía de WhatsApp.
Si bien existe WhatsApp Public, una aplicación que permite espiar a tus
contactos en Whatsapp, otro fraude relacionado con WhatsApp va más allá
y ofrece (con un nombre prácticamente idéntico) un servicio con el que
cualquiera podría llegar a leer conversaciones ajenas. En realidad, solo
es otra forma de instalar malware en los dispositivos de los usuarios
más ingenuos.
Protección: no se pueden espiar conversaciones ajenas.